jueves, 1 de julio de 2010

EL ARTE ES PARA EL PENSAMIENTO

Hola a todos.

Como he recibido muchas respuestas y observaciones a mi anteúltimo envío "QUÉ ES EL ARTE", decidí ampliar un poco más el tema, especialmente en lo que se refiere a la relación del arte y el mercado.

Yo creo, que si alguien está preocupado por producir una gran cantidad de objetos cuyo destino es el mercado -y no el pensamiento- no puede ser artista -ni crítico-.
Cuando un artista quiere vivir del arte -repito, vivir económicamente del arte, ya que hay muchas formas de vivir del arte- y está feliz porque, por ejemplo, una galería lo contrata y le paga por producir diez o veinte obras al mes de determinados formatos y eso es lo que hace de allí en más para ganarse el sueldo, ha perdido algo de vista, ha dejado de ser artista para centrar su visión en el mercado; seguramente vivirá mejor, comerá en mejores restaurantes, se comprará el auto, pero algo ha perdido por el camino, algo ha negociado con el sistema, tal vez lo más importante que tenía. ¿Saben los peces que viven en el agua? ¿Saben que hay un inconmensurable "fuera del agua"? No, no saben. Lo mismo pasa con nosotros, habitantes del hipercapitalismo globalizado donde todo es mercancía, donde también nosotros somos mercancía, porque ella es el valor supremo. Por eso no importa que haya abogados, médicos, artistas, arquitectos o psicoanalistas porque lo que unifica todo, lo que anula las diferencias -y acentúa las desigualdades- es la forma mercancía, la lógica del capitalismo. Por eso, es justamente el artista quien debe saber que hay un inconmensurable "fuera de la lógica mercancía".
EL ARTE ES PARA EL PENSAMIENTO y no hay pensamiento donde sólo hay mercado. Repito, y ya lo dije muchas veces, la obra puede ser mercancía -o de hecho lo es ya que puede comprarse y venderse- pero esa no es la cuestión: el problema es que desde su génesis sea concebida como mercancía, porque allí entonces, ya no hay un artista, sino un productor de mercancías.
EL ARTE ES PARA EL PENSAMIENTO; el arte es espíritu -descargado este concepto de connotaciones metafísicas y entendido como potencia de transformación-.
Vivimos en un sistema donde tenemos que negociar a diario nuestras ideas, nuestras convicciones. Vivimos bombardeados por imágenes banales, horribles, bellas -convencionalmente bellas-, pero nada es distinguible allí, todo se iguala porque todo es mercancía. Todos los días debemos negociar cosas con el sistema, de una u otra manera, todos los días deponemos alguna de nuestras ideas, alguno de nuestros principios para sobrevivir dentro de un sistema brutal de desigualdades, de competencia feroz que se autoproclama "natural". El arte, para un artista, debería ser el lugar de no negociación, el lugar que no se entrega a la lógica del sistema, “lo otro del capitalismo”, el lugar ideal para pensar ese inconmensurable “fuera de la lógica mercancía”. Una vez más: no estoy diciendo que uno no deba vender sus obras, estoy diciendo que ese no debe ser el objetivo primero de un artista.
Justamente por estos días en que estoy escribiendo estas líneas se lleva a cabo en Buenos Aires una nueva edición de la feria Arte-BA. Estuve en la inauguración y un artista amigo me decía que era muy triste que el principal evento artístico de todos los años en Bs. As. fuera una feria de arte –aclaro que es un artista que siempre tiene obra en Arte-BA-, y yo no podría estar más de acuerdo con esa opinión, porque el arte no tiene nada que ver con el mercado del arte, porque el mercado todo lo distorsiona. Una feria no puede, no debe ser el evento principal del año en el campo del arte; ese, creo, es un debate que nos debemos. ¿No sería mejor que tuviéramos una bienal? ¿No sería mejor aún si los mecanismos de selección para esa bienal no fueran los mismos mecanismos que siempre se usan en nuestro medio, donde los que deciden son una élite cuyos intereses están indiscerniblemente ligados al mercado? Otro debate que nos debemos.
Arte-BA es una FERIA; y ya sea de verduras, de autos, o de cuadros, una FERIA SIEMPRE ES UNA FERIA, y el arte no es una feria….

EL ARTE ES PARA EL PENSAMIENTO.


Hasta la próxima.
El Pato.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que tenemos poca distancia para evaluar !el arte! contemporaneamente a su producción. Obviamente Arte Ba es una gran feria que refleja el omnipresente mercado que nos constituye, pero albergo la esperanza de que la experiencia artística seguirá aflorando, a pesar de todo, nos renovará, nos conmoverá y en algún momento nos reforzará nuestra convicción de una manera de buscar "artísticamente". Dejemonos llevar por una mirada inquieta y lo que no sea interesante, ya decantará.

Anónimo dijo...

Pero dijiste "no estoy diciendo que uno no deba vender sus obras, estoy diciendo que ese no debe ser el objetivo primero de un artista".
Estoy de acuerdo que Arte Ba es el gran evento de arte del año, pero tampoco creo que es su culpa. Es el gran evento porque desde el sector público no se ha hecho nada. Quizas si hubiera una Bienal, no se sentenciaría tanto a Arte Ba ni a las ferias. Creo que está bueno que haya distintos cirucuitos pero siempre y cuando se deje en claro los distintos objetivos de los mismos. Arte Ba es una feria de galerías y las galerías quieren vender. Quizas lo que habría que replantearse es el concepto y la dinámica de las galerías hoy, pero no creo que Arte Ba tenga que cambiar su foco ni cuestionarse tanto. Apuesto en cambio a que surjan nuevos espacios. Tampoco me hacen tanto ruido las ferias. Esta claro que vender la obra no debe ser el punto de partida al hacerla, pero creo que el artista hoy ya no es el romántico aquel que encerrado en su estudio se iluminaba e inspiraba y, de un contacto con quien sabe qué, nacía su obra. El artista ya está en condiciones de interactuar con el espectador, recibir de primera fuente lo que su obra produce en aquel que la ve y, sobre todo, es capaz de decir "sale tanto". No me parece mal ni me parece que haya transado con el sistema, mientras, como dijiste, no sea eso el objetivo primero del artista.